Solamente una vez


La famosa canción Solamente una vez, de la pluma del inmortal poeta, compositor y músico mexicano cuyo nombre está grabado en los registros oficiales de Tlacotalpan, Veracruz, su ciudad natal, como  Angel Agustín María Carlos Fausto Mariano Alfonso del Sagrado Corazón de Jesús Lara y Aguirre del Pino, apodado el divino flaco y de muchas maneras más, pero que recordamos por su nombre artístico es Agustín Lara, es una narración de un sentimiento vivido por un individuo que tuvo la esperanza de alumbrar con amor el obscuro camino de su soledad y no pudo lograrlo ante el hecho de que no había condiciones para seguir con el delirio de esa pasión que hace entregar el alma, pero al abrir los ojos, es necesaria la renunciación. 





El motivo de la  renunciación descrito en esa canción no es muy evidente como el que expusimos hace algún tiempo por este mismo medio, pero por una milagrosa forma de convencer a los señores legisladores que hacen su trabajo a cualquier precio, se permitió la magia de una repostulacion presidencial por una sola vez y nada más, con la posterior  reelección de un mandatario, que hasta ahora, ha querido enseñar al mundo cosas hartamente sabidas y que la gente califica como atrocidades contra el espíritu de las verdades irrefutables. 

La pena que debe sentir un gobernante que escuche a otro gobernante diciendo cosas tan inverosímiles como poner de manifiesto que desde el 2013 hasta 2018 (5 años) nuestra población contribuye para que el 4% del PIB que genera el sudor de la frente que este pueblo, día a día, sobre un surco abierto bajo un sol ardiente o al lado del fuego abominable de un horno donde se cuece el pan que nutre a estudiantes que merecen recibir la mejor enseñanza, por el costo que tiene y simultáneamente con ese pronunciamiento se escuche al ministro responsable de la calidad de la enseñanza afirmar que precisamente esa generación de párvulos NO SABE LEER como debería saber todo estudiante promedio con ese nivel de aprendizaje. 

Esa caricatura de enseñanza es definida por el jefe del sindicato de profesores como un reto para seguir adelante. 

Con ese pesado fardo encima, hay un grupo de personas que tiene la cachaza de proponer modificar nuevamente la Constitución para que exista la posibilidad de un tercer mandato para esta sarta de indolentes y mentirosos a ultranza, quienes han propiciado la implantación de un régimen carcomido por la corrupción, sostenido sobre una arena movediza llena mentiras y falsedades. 

La gestión de un hombre que construyó popularidad a base de argumentos creíbles, esperanzas fundadas en cuestiones que fácilmente inducían a favorecerle con el voto popular, hoy en día no convence a la gente que le regaló el poder en dos ocasiones consecutivas. 

Esa gente está en la obligación de respetar la Constitución del 2012 y deberá recordar lo dicho por el admirado poeta y músico citado:  Solamente una vez.... Y nada más..!

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