DIARIO DEL OZAMA

A palabras necias, oídos sordos. Es un refrán muy castizo que se ha extendido por todo el planeta y tiene un significado muy especial.  Quien no desee seguir leyendo estas ocurrencias que no lo haga. Total, al igual que el refrán de marras, a lecturas molestosas, lectores indiferentes.  Esto no es política.  No es religión. No es anarquía. No es xenofobia. No es racismo.  Es quizás, algo  semejante o parecido a lo que pueda venir a su imaginación, si continúa leyendo.  Es una lista de pantallazos históricos, no muy bien explicados, que han modificado todo el panorama primigenio de la Isla Hispaniola, desde antes de 1492 hasta estos días.  Estos eventos se detallan sin recurrir a ningún texto.  Eso significa que existe de antemano, toda la libertad de críticas, señalamientos, maldiciones, elogios o cualquier ocurrencia de tipo libertaria. - No hay certeza sobre la real procedencia de nuestros aborígenes, pero las raíces de sus antepasados podrían ser asiáticas.    - La llegada a la Hisp

Ser dominicano por nacimiento y origen no es una carta de triunfo para la obtención de honores merecidos, sino por una serie de razones que tienen mucho que ver con el momento histórico en que viva la nación.  El pensar y el sentir de cada dominicano está orientado al debate, la rivalidad, la imposición del criterio de quien expone o trata cualquier tema, pero, en eso de convivencia y reciprocidad solamente se logra entre algunas familias que han crecido bajo la luz de un patriarca que la rige.  El ejemplo familiar es la base de la formación moral, académica y hasta la parte relativa a la denominada espiritualidad inducida por eventos que frecuentemente se celebran para rendir culto a la tradición forjada por nuestros más ancestrales ascendientes.  ¿Porqué tiene que ser así? Los centros de enseñanza, tanto  públicos como privados, se rigen por un patrón trazado por el especial interés que tienen los mentores que han propiciado los métodos que son de su interés. Esa tradición es tan ant